Siendo Señora

Sin serlo.
Más como aquello de "Y es que yo, amo la vida y amo el amor. Soy un truhán, soy un señor, algo bohemio y soñador"
 Por respeto a las canas que asoman y a las formas, aunque arrastre algo de nostalgia y mucho de contracorriente, el ser señora atrapa mi zona de seguridad, aquí donde estoy cómodamente contando.
Así que me define, me arropa, y aspiro a que me coloque dentro del preciado club que forman todas las señoras que en el mundo han sido, llenas de curiosidad, sin miedo a dejar atrás a la niña que fueron, sumando cada día, sin estrépito.


0 comentarios:

Publicar un comentario